“El lunes 26 (de Julio) fue detenida Hilda Saldarriaga Bracamonte (36), conviviente del hampón chimbotano Arnaldo Ordinola Muñoz (40), ‘Nayo’. En el Departamento de Prevención de Robos de Vehículos de Chimbote declaró, en presencia del fiscal Lorenzo Melgarejo, que tres días antes del crimen ‘Nayo’ recibió en su casa a Rubén Moreno Olivo, ‘Goro’, Jaime Sánchez Cachay, ‘Piolín’ y Edson Torres Corzo, ‘Chilipino’, todos angelitos rankeados, para planear el atentado”.
Estas son las líneas principales con que la revista limeña “Caretas” inició su argumento de un trabajo de supuesta investigación periodística sobre el criminal y cobarde atentado en contra del consejero regional por Ancash Ezequiel Nolasco Campos cometido la noche del pasado 20 de Julio.
Prosigue en su segundo párrafo que “la mujer añadió que al encuentro asistió el actual gerente de la Subregión del Pacífico del Gobierno Regional, Luis Arroyo Rojas, que según ella pagó S/.60 mil para matar a Nolasco”.
La ciudadanía chimbotana y prensa local quedó pasmada por las afirmaciones del reportero limeño que trabajó la “investigación” toda vez que ningún periodista local había obtenido dicha versión de fuentes oficiales.
En todo caso algunos reporteros recogieron la versión de Hilda Saldarriaga negando haber declarado lo que inicialmente se constituyó como un valioso indicio para dar con los asesinos del hijo del consejero.
Tal “sindicación” proveniente de boca de Saldarriaga Bracamonte no fue tomado por ningún periodista local en todo caso fueron versiones brindadas por las fuentes policiales sin el sustento que ampare la afirmación o al menos contrastadas con fuentes oficiales y directas encargadas de dicha investigación.
Volviendo a las líneas de “Caretas”, esta planteó que la mujer del sujeto identificado como “Nayo” sindicó “en presencia del Fiscal Lorenzo (Javier) Melgarejo tres días antes del crimen (que) ‘Nayo’ recibió en su casa a Rubén Moreno Olivo, ‘Goro’, Jaime Sánchez Cachay, ‘Piolín’ y Edson Torres Corzo, ‘Chilipino’, todos angelitos rankeados, para planear el atentado”.
La versión respecto que dicha mujer declaró en presencia del Fiscal Javier Melgarejo es totalmente falsa por que ello no es lo que Saldarriaga Bracamonte declaró oficialmente.
Recuérdese que la mujer declaró a algunos medios que sí sindicó a los hampones arriba mencionados en un acto de desesperación para canjear su libertad toda vez que estaba requisitoriada por la Justicia y sería definitivamente una nueva inquilina en el penal de la ciudad.
Ella sindicó a los presuntos autores y no fue al penal evidenciándose el canje, pero lo que olvidaron hacer los efectivos policiales es llamar inmediatamente al Fiscal para que tome valor dicha declaración.
¿Por qué no lo hicieron evitando que se siga con todo el interesado manoseo que se da al caso?, ¿ a quién y por qué le interesa seguir lanzando acusaciones mediáticas?.
Dicha exigencia resulta de suma importancia porque es imprescindible la declaración de todo acusado en presencia del representante del Ministerio Público por ser el representante de la legalidad y solo asi se toma como ciertas las afirmaciones del investigado, de lo contrario nada tiene valor para los efectos del esclarecimiento del caso.
Sin embargo, con ello “Caretas” motivó en la ciudad que la prensa local fuera tratada (por algunos) de deficiente, que los reporteros de noticias policiales no son buenos sabuesos por que un periodista limeño les enrostró en su propia tierra lo que debe hacer un verdadero profesional de las noticias.
El autor de la “investigación periodística” de la revista limeña significó a esta (se supone, por que no creemos que la investigación la hicieron por teléfono) todo un gasto de tiempo y dinero para nada ya que solamente vino a acopiar lo que días antes la prensa chimbotana había informado profusamente de fuentes oficiales y fuentes muy confiables aunque con el añadido de la mentira que Hilda Saldarriaga declaró en presencia del Fiscal.
En conclusión, la siempre respetada “Caretas” falló por la irresponsabilidad de un reportero que no investigó nada y tiene ahora la obligación de reivindicarse con la enorme lectoría que semana a semana sigue leyendo sus páginas.
El presente artículo no es una defensa de nadie por que quien haya sido el o los autores del atentado al consejero Ezequiel Nolasco donde murió su hijo deben ser plenamente identificados y denunciados con pruebas contundentes que conlleven a una denuncia penal sólida que no implique dudas en el proceso que a la larga significaría una absolución de los criminales.
Y este es precisamente el pedido de la población es por ello que el Fiscal Javier Melgarejo continúa dirigiendo la investigación encargada a un equipo especial de la Dinincri que hasta el momento con todas sus técnicas de pesquisas y seguimiento no logran obtener los resultados por todos esperados.
La policía debe ahora, también, buscar y encontrar indicios que lo dicho por la mujer de “Nayo” en ausencia del magistrado del Ministerio Público es veraz a efectos de tomar su declaración (esta vez) en presencia del Fiscal solo asi se podría adoptar acciones más decididas sobre los autores intelectuales y materiales del sonado crimen que, además, develará el verdadero misterio del móvil mandando al tacho todo el manoseo que se viene dando a un hecho que jamás debe repetirse.
Cuando ello suceda la población chimbotana debe ser debidamente informada a través de sus periodistas que son tan iguales y mejores que los colegas de Lima.
Para mayores luces de lo sostenido en este medio está la versión del Fiscal a quien jamás entrevistó “Caretas” y quien sin mayores detalles pero respondiendo a preguntas de la prensa sostiene que lo afirmado por la revista capitalina no es cierto. (8-8-10)
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